Cordero Manchego




El Cordero Manchego procede exclusivamente de la raza autóctona; son corderos machos sin castrar y hembras, con un peso que oscila entre los 22 y 28 kg, de carne magra o medianamente grasa, de grasa color blanco cremoso y cuya edad está comprendida entre los dos y tres meses.
Desde antiguo, su degustación ha sido propia de las Fiestas Navideñas y de Pascua, estando ligada a la tradición pastoril. En Castilla-La Mancha sigue conservando este carácter tradicional.
El cordero lechal manchego constituye toda una delicia para el paladar. Sus características bien definidas son su jugosidad, su color rosa pálido y su flavor- conjunto de impresiones gustativas y olfativas provocadas en el momento del consumo- la hacen muy apreciada, estando presente en todas las cartas de los restaurantes castellano-manchegos.